Carta Cerrada a la MUD

Si está leyendo esta carta y no pertenece a la MUD, déjeme decirle que está cometiendo el delito de Violación de Correspondencia, y por tanto puede ser penado con cárcel…, pero como no soy gobierno para encarcelarlo por lo que me parezca, su sentencia es no quejarse por los comentarios que acá lea.

Antes que nada debo aclarar lo siguiente: 1. Estoy de acuerdo con el dialogo aunque haya una "intención de trampa" (por que no queda otra); 2. Estoy en desacuerdo con aquellos que con sus
actuales acciones “no pacificas” están ayudando a lavarle la cara y las manos al régimen después de haber logrado mostrar tanta suciedad; 3. Doy mi voto de confianza (no un cheque en blanco) a la MUD como mi representante frente al régimen.

Ahora bien, es claro que en su Misión de representante, deben estar presentes las prácticas de: escuchar, informar, orientar, tranquilizar, y estar al pendiente de las preocupaciones de sus representados, y es allí donde me parece que se está fallando.

Si bien es cierto que los puntos que se deben manejar en el dialogo son los temas capitales, las mayores preocupaciones de sus representados pueden estar apuntando en otra dirección (validas o no), probablemente a temas particulares, pero que igual necesitan de información y orientación.

Uno de estos temas, quizás el más perturbador para los representados, es el tema de la educación. Probablemente y quizás con toda razón, los representantes piensen que este no es el tema capital del actual dialogo y que solo se trata de una campaña del oponente para distraer y para inducir a errores, ya que esto ha sido una política constante del régimen, y por lo cual no se debe gastar, por ahora, el valioso tiempo en dicho tema. Sin embargo y más allá que sea o no una preocupación realista (en este momento), No puede ser que el representante no se sienta llamado a hablar con su representado sobre esta genuina preocupación, e incluso que “guarde silencio” sobre este tema tanto dentro como fuera del dialogo (?).

Es importante que se entienda que la representación no es solo para los temas que los representantes sabiamente hayan escogido para el dialogo, la representación es también para los temas de interés del representado, por lo que quizás se debiese evaluar si conviene definir voceros de la MUD, diferentes a los encargados del dialogo, para atender estos otros temas “triviales” con sus representados.